Año de Fundación: Desconocido. Su reorganización más reciente se produjo en el año 1919, aunque no procesionaria hasta 1920 al no disponer de las ropas. La vestimenta fue costeada por los 7 hermanos, aunque el hermano mayor de la cofradía, Tomás Bujalance, prestó la mitad del dinero. En el año 1895 se constataba la existencia de la Hermandad de las Virtudes, que depende de la cuarta cuadrilla de los judíos, según se recoge en el libro de fundación de la hermandad. En 1915 se acuerda que la Hermandad de las Virtudes desfile tras el trono de la Verónica. Hasta 1918 sus integrantes vestían ropa blanca, banda, rostrillo y peluca. Como sucede con el resto de las figuras bíblicas, su origen no está contractado, aunque se considera que sus inicios se produjeron durante el siglo XVII o principios del siglo XVIII.

 

Fundadores: José Baena Damián, José Flores Dios, José Jiménez Padilla, Salvador Navea Navarro, Manuel Peña Mendoza, Manuel García Cruz y Daniel Ortiz.

 

Hábito: Siete vestimentas de distintos coloridos, portando los hermanos rostrillos con peluca y un atributo identificativo de la virtud que representan. Las siete virtudes llevan los siguientes atributos: fe (báculo, banda y cáliz; lleva los ojos vendados), esperanza (áncora y libro), caridad (dos niños), prudencia (serpiente, espejo), justicia (balanza y espada), fortaleza (báculo) y templanza (jarro y palangana).

 

Datos de interés: Los rostrillos que se adquirieron en 1919 eran de alambre, siendo sustituidos por otros de cartón en 1924. El domingo de Pascua de 1944 se produce el relevo del cuadrillero José Baena Damián, que había estado al frente de la Hermandad de las Virtudes desde 1919, al presentar su dimisión por razones de edad. Según reconoce la Hermandad de las Virtudes en la revista Cabildo de 1992, existieron distintos problemas al no devolver el cuadrillero el antiguo libro de estatutos y la ropa de la Templanza, al considerar que eran suyos. En una reunión posterior se eligió por unanimidad a José Flores Dios como nuevo cuadrillero. El 10 de marzo de 1945 se redactó un nuevo reglamento y se conformó la nueva directiva, que tuvo que iniciar un nuevo libro de actas. La Hermandad de las Virtudes acordó el 1 de marzo de 1946 la segregación definitiva de la cuarta cuadrilla de judíos de la cola negra, al haber permanecido vinculada, a menos, desde su reorganización. Ese mismo año, la hermandad aprobó ayudar a los familiares de los hermanos fallecidos con 75 pesetas y la asistencia al sepelio con corbata negra y escudo de la Hermandad de las Virtudes.

 

En 1955 se eligió nuevo cuadrillero a Manuel Galisteo Ruiz, siendo nombrado cuadrillero honorario José Flores en reconocimiento a su labor a la Hermandad de las Virtudes. No obstante, Manuel Galisteo renunció al año siguiente por tenerse que desplazar a Madrid. Entonces fue elegido Vicente Priego Galisteo como cuadrillero.

 

La Hermandad de las Virtudes elaboró un nuevo reglamento en 1958, acordándose entonces subir la cuota a 600 pesetas, y un nuevo relevo se produciría de la directiva en 1959, cuando fue nombrado como cuadrillero José Jiménez Gutiérrez.

 

En 1967 ocuparía el cargo José Jiménez Mendoza, persona con la que vuelve a tomar un gran impulso la Hermandad de las Virtudes, y se fijó una nueva cuota de entierro de 1500 pesetas. Cuatro años después, en 1972, es elegido cuadrillero Rafael Jiménez Garrido. En marzo de 1973 se acordó un nuevo reglamento. Durante este mandato, se inicia la restauración de vestimentas y enseres de la Hermandad de las Virtudes.